¿Cuáles son los aspectos que tienen en cuenta los compradores de una vivienda vacacional?

Cuando estamos pensando en comprarnos una vivienda como primera residencia, siempre tenemos en cuenta algunos aspectos determinantes como la cercanía al trabajo o a los colegios pero en el caso de comprarnos una vivienda vacacional, también hay ciertas características específicas que se tienen en cuenta independientemente de los gustos personales.

En Finques Vallbona te explicamos cuáles son los aspectos que tienen en cuenta los compradores de una vivienda vacacional.

De la misma manera en que la ubicación influye bastante a la hora de comprar una primera residencia, también es un factor determinante a la hora de comprar una vivienda de vacaciones. La mayoría de los compradores eligen viviendas más alejadas de núcleos urbanos, preferiblemente en zonas rurales. Sin embargo, no podemos dejar de tener en cuenta que la mayoría de clientes que busca una vivienda de vacaciones tiene en cuenta sus propios gustos y preferencias personales, por eso, suelen comprar propiedades en destinos que sean lugares vacacionales.

El segundo factor determinante para elegir una vivienda de vacaciones es que tenga espacio exterior en forma de jardín o terraza.

Asimismo, la amplitud y el número de habitaciones se ha convertido también en una prioridad, sobre todo, porque tras la era post confinamiento y la implantación del teletrabajo, hay muchas personas que aprovechan estas viviendas vacacionales para trabajar desde casa y por lo tanto, necesitan viviendas que cuenten con espacios adaptados para ello.

Junto con estas características principales, hoy en día, la persona que invierte en una vivienda vacacional también tienen cuenta cuál va a ser el retorno de la inversión, ya que si tenemos en cuenta de que uno de cada cinco propietarios aprovecha durante el tiempo que no habita la vivienda para alquilarla, este número asciende con respecto a los compradores potenciales de los que se estima que el 24% tiene intención de alquilar su vivienda más de 32 semanas al año.

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